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➤ Calle de Lope de Rueda, 30, 28009 Madrid, España
Con una propuesta gastronómica que busca rescatar los sabores tradicionales, esta empresa madrileña se ha ganado un lugar en el corazón de la ciudad. Ofreciendo un ambiente acogedor con dos espacios distintos, barra y comedor, invita a los comensales a disfrutar de una cocina sencilla y auténtica. Destacan por la calidad de su materia prima, que se refleja en platos emblemáticos como las Croquetas Crujientes De Jamón Ibérico, las cuales han conquistado el paladar de los madrileños. Su enfoque en la tradición culinaria y la calidad de sus platos les ha permitido destacarse en el competitivo escenario gastronómico de Madrid.
➤ Paseo de Eduardo Dato, 5, 28010 Madrid, España
Google: 4,3/5 (26 Opiniones)
➤ Calle de Colón, 13, 28004 Madrid, España
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➤ Calle Menorca, 4, 28009 Madrid, España
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➤ Calle de Tetuán, 12, 28013 Madrid, España
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➤ Calle del Castillo, 16, 28010 Madrid, España
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➤ Calle Cava Alta, 17, 28005 Madrid, España
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➤ Calle de Juan de Mena, 14, 28014 Madrid, España
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➤ Calle de Toledo, 28, 28005 Madrid, España
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Las croquetas tienen un origen incierto, pero se cree que provienen de Francia o España. En Francia, se mencionan por primera vez en un libro de cocina del siglo XVIII, mientras que en España, se popularizaron en el siglo XIX. Se cree que surgieron como una forma de aprovechar sobras de carne o pescado, mezclándolas con bechamel y luego rebozándolas y friendo. A lo largo del tiempo, las croquetas se han convertido en un plato muy popular en todo el mundo, con variaciones que incluyen ingredientes como jamón, pollo, bacalao, espinacas, y queso.
La receta tradicional de las croquetas incluye ingredientes como leche, harina, mantequilla, y el ingrediente principal (como jamón, pollo, o pescado). Primero se prepara una bechamel con la mantequilla, la harina y la leche, a la que se le añade el ingrediente principal. Después, la mezcla se deja enfriar, se forman las croquetas, se rebozan en huevo y pan rallado, y finalmente se fríen hasta que estén doradas. Esta receta básica se ha adaptado a lo largo del tiempo, dando lugar a numerosas variaciones regionales y personales.
Las croquetas se suelen servir como aperitivo, tapa o plato principal, dependiendo del tamaño y la presentación. Se pueden acompañar con salsas como alioli, salsa brava, o salsa de tomate, o simplemente se sirven solas. En España, es común encontrarlas en bares y restaurantes como parte de la oferta de tapas, mientras que en otros países se sirven como plato principal acompañadas de ensaladas o guarniciones. La versatilidad de las croquetas permite adaptar su presentación a diferentes ocasiones y preferencias culinarias.
Además de las croquetas de jamón, que son quizás las más conocidas, existen numerosas variantes populares de croquetas. Algunas de las variantes más comunes incluyen croquetas de pollo, bacalao, espinacas, queso, setas, y marisco. Estas variantes reflejan la diversidad culinaria de diferentes regiones y la creatividad de los cocineros. Además, en la actualidad, se han popularizado versiones vegetarianas y veganas de croquetas, que utilizan ingredientes como garbanzos, espinacas, o setas en lugar de carne o pescado.
El secreto para hacer unas croquetas perfectas radica en la preparación de una buena bechamel, que debe tener la consistencia adecuada para que las croquetas mantengan su forma al freírlas. Además, es importante dejar enfriar bien la mezcla antes de formar las croquetas, para que no se deshagan al manipularlas. Otro aspecto crucial es el rebozado, que debe asegurar que las croquetas queden crujientes por fuera. Finalmente, la elección de ingredientes frescos y de calidad es fundamental para el sabor final de las croquetas.
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